Muchas personas han incorporado la práctica de ejercicio a su rutina y ya no saben pasar sin su dosis de actividad diaria o semanal, pero para otras hacer ejercicio se convierte en algo obligado y tedioso hasta que terminan dejándolo por aburrimiento o pereza.
Compartimos algunos consejos para que hacer deporte sea más divertido, dinámico y puedas mantener un estilo de vida saludable.
¿Tienes una meta?
Marcarse una meta es una buena manera de mantener la motivación. Tener unos objetivos y cumplirlos nos da satisfacción y nos hace ser constantes y echarle ganas a la tarea que estamos realizando. Ir al gimnasio una vez por semana o dos, perder 5 kg, correr una carrera,… ¡Elige tu meta!
Equípate adecuadamente
No es lo mismo correr que hacer una sesión de aerobic, es importante que lleves las zapatillas y la ropa idóneas para poder realizar sin ningún riesgo la actividad deportiva que prefieras. También es importante tener tu bolsa de gimnasio siempre a mano para ir a entrenar fácilmente. Si la tienes medio hecha, te dará menos pereza que tener que hacerla cada vez que vas a hacer deporte.
Elige tu horario de entrenamiento
Es importante saber de qué tiempo disponemos y cuándo nos va mejor entrenar. Hay personas a las que les va muy bien hacer deporte de buena mañana y así se sienten mejor todo el día, y hay otras personas que prefieren hacerlo por la tarde, al terminar su jornada laboral. En función de tu agenda escoge el horario que te sea más práctico para no saltarte tu momento de ejercicio por el trabajo o por planes que te puedan surgir.
Con música siempre es mejor
Aprovecha para escuchar nuevos grupos y descubrir canciones en tu iPod mientras entrenas. Es una buena manera de asociar la actividad física con un momento de desconexión y novedad, para disfrutar de tu tiempo y de música que te aporte motivación.
¡Tus amigos son grandes aliados!
Una gran manera de mantener la motivación a la hora de hacer ejercicio es el hecho de compartirlo con un amigo, con tu pareja o con alguien que esté en el mismo punto que tú. A parte de tener compañía y alguien con quién realizar esa actividad, es casi imposible decirle que no a un amigo ¡y es mucho más probable que no pongamos excusas!
Conoce tus límites
Es muy importante conocer hasta dónde puede llegar nuestro cuerpo, y más si somos principiantes. Aunque tengamos muchas ganas, al no estar acostumbrados, no es buena idea hacer ejercicios de una intensidad demasiado alta sin tener unas condiciones físicas adecuadas. Hay que hidratarse bien e ir empezando a hacer ejercicio de manera suave y progresiva, así conoceremos nuestros límites y podremos superarlos día a día.
¿Qué te divierte?
Hay que disfrutar con la actividad que realicemos, es la clave para no dejarlo por aburrimiento. Si te gusta bailar, aprovecha las clases con música, si te gustan los deportes de equipo, prueba a apuntarte a algún equipo para sentirte motivado, etc. También la diversidad es un pilar, si haces cada día lo mismo, te desmotivarás. Intenta cambiar de ejercicios Y descubrir actividades diferentes, en GymForLess tenemos todo tipo de actividades para que elijas la que más te guste.
Además, es buena idea incorporar maneras de mantenerte activo en tu vida cotidiana como por ejemplo ir en bici al trabajo o pasear por la montaña los fines de semana.
Atrévete a conocer a gente nueva
Es muy posible que otras personas que comparten tu clase en el gimnasio o tu afición por el deporte puedan tener otras pasiones en común contigo. Puedes compartir con ellos conversaciones o aficiones que os ayudarán a tener más motivos para continuar con vuestra rutina saludable.
Cambia de escenario
Combinar ejercicios en casa con ejercicios al aire libre y en el agua en piscinas, o acudir a gimnasios con diferentes actividades es todo un lujo para desconectar mentalmente y mantenerse en forma sin caer en la repetición. Opciones como GymForLess te permiten cambiar de gimnasio siempre que lo desees y descubrir distintos centros con actividades diversas en cada punto de la ciudad. Si te apetece una tarde de natación puedes elegir un club con una piscina, si prefieres una sesión de spinning tienes muchas opciones que te ofrecen esta clase dirigida, si te apetecen unos bailoteos a ritmo de zumba sólo tienes que elegir tu clase en el gimnasio que esté más cerca de tu casa o trabajo… ¡Tenemos muchísimas opciones disponibles en cualquier momento y lugar!