El psicólogo y psicoanalista Carlos de la Cruz Gutierrez protagonizó el primer webinar de Andjoy, que trató sobre los efectos emocionales del confinamiento y sobre cómo afrontar la nueva normalidad. Una charla que intentó dar respuesta a lo que estamos viviendo emocionalmente.
Nuestro experto es consciente de que esta pandemia nos ha quitado cosas muy importantes, como la salud, la alegría y la confianza. Cada persona ha vivido esta situación de una forma radicalmente diferente a las demás. Pero es probable que todo en algún momento hayamos podido sentir miedo, temor, rabia, ansiedad, tristeza, etc.
Consejos para salir ileso emocionalmente de esta pandemia
1. Escucharnos para poderlo traducir
Parece que en el momento actual nos obligan a tener que sentirnos positivos, fuertes, tener respuestas, ser rápidos y ser productivos. De alguna manera, esta pandemia nos enseña también que hemos de escuchar nuestras fragilidades, nuestra vulnerabilidad.
Uno de los consejos es escucharnos para poderlo traducir, para podernos explicar de qué se trata lo que estamos sintiendo. Si somos capaces de poner palabras a lo que vivimos nos ahorraremos que sea nuestro cuerpo quien nos dé noticia de ello. Por ejemplo, cuando alguien dice que tiene la espalda tensionada es cuando no nos estamos permitiendo poner palabras, traducirnos lo que estamos viviendo.
2. Diferenciar entre información e infoxicación
Ante situaciones complejas no existen respuestas simples. Estamos en una sociedad y en un momento, donde la inmediatez es posible. Pero esta pandemia nos ha enseñado que también hay que parar un poco y dimensionar las cosas sin sentir un deseo impulsivo de tener respuestas demasiado pronto.
3. Tener en cuenta el pasado, el presente y el futuro
Algunos profesionales han defendido que hay que anclarse en el presente, tenerlo como referente y actuar. El presente y la acción, a veces, alivia, pero el pasado y el futuro nos sirven como mapa. Necesitamos recordar para ver lo que hemos perdido para poder dimensionarlo, para poder desear hacia dónde queremos ir. Hay que tener en cuenta los 3 tiempos.
4. Relativizar la situación
Es una situación difícil, pero existen dos buenas herramientas como son el humor y la ironía. Estar en un momento triste no es incompatible ni inmoral con poder tener una sonrisa o una carcajada con alguien.
5. Adaptarnos
Aquello que teníamos en nuestra mente se vio desmontado. Ahora parece que podemos empezar a recuperarlo. ¿Cómo hacer un buen desconfinamiento? Es interesante ver la capacidad de adaptarnos que hemos tenido y tenemos. No podemos perder de vista lo que hemos vivido, no podemos negarnos la realidad de lo que hemos aprendido.
Vuelta a la rutina
¿Cómo podemos prepararnos a nivel emocional para la vuelta a la oficina después del verano y del desconfinamiento?
No podemos imaginarnos una vuelta como si nada hubiese ocurrido, como si volviéramos de nuevo a lo ya conocido, sería una manera de negarnos la capacidad de ser flexibles, de estar abiertos.
Sabemos que algo de lo que conocíamos va a permanecer, pero también sabemos que es posible que algo nuevo nos encontraremos. Esa capacidad de estar abiertos a lo que se presente como diferente. Mi recomendación es este punto de apertura, de flexibilidad, de mirar cómo algo nuevo se va a presentar, qué hacer con eso nuevo, darse tiempo, no querer tener respuestas cerradas.
Es un artículo muy interesante, lo seguiré al pie de la letra. Muchas gracias por las recomendaciones.