El trabajador es uno de los recursos más importantes de la empresa. De su buen estado de ánimo dependerá su rendimiento dentro del negocio, por lo que el empresario debería preocuparse por mantenerlo contento para poder ser más competitivo en el mercado.
Una forma bastante sencilla de mejorar el estado de ánimo de los trabajadores es ofrecerles ciertos beneficios sociales. La empresa puede cubrir una parte o la totalidad de la cuota de algunos servicios como la conciliación familiar, ofrecer un cheque de guardería, diferentes clases deportivas o un seguro médico. Toda esta inversión en los trabajadores es devuelta a la empresa en un mejor rendimiento por parte de estos.
Teniendo en cuenta esto, la empresa debe cuidar el buen estado de sus empleados y, para lograrlo, cada vez son más las empresas que optan por facilitarles el acceso a una vida saludable.
Llevar una vida sana son beneficios para empleados y una de las formas que tiene la empresa para lograrlo es facilitarles el acceso al deporte. El buen estado del trabajador se traduce inmediatamente en ventajas para la empresa y en este artículo vamos a ver algunas de ellas.
Incremento de la productividad
Un trabajador contento es un trabajador que rinde más. Cuando un trabajador se encuentra bien y cuenta con un mejor estado de ánimo transmite todo eso en la empresa. El empleado trabaja de una forma mucho más eficiente, trabaja mejor de cara al público y resuelve los problemas de la mejor forma posible.
Lograr un incremento de la productividad de esta forma es altamente beneficioso para la empresa. Otras empresas pueden incrementar también este rendimiento a base de refuerzos negativos, horas extras y otra serie de acciones que distan mucho de la vida saludable que anteriormente hemos descrito.
Una empresa que mejora la productividad de esta forma es mucho más competitiva a corto y a largo plazo. Además, con el paso del tiempo, irá ganando fuerza en el mercado debido a que sus competidores tendrán bastante complicado poder seguir sus pasos salvo que apliquen los mismos métodos.
Compromiso con la empresa
La clave del éxito de cualquier empresa es saber anteponer el interés general al particular. Esto es algo complicado a cualquier nivel de la empresa. En ocasiones, el interés personal por parte de los empleados puede acabar provocando problemas en la empresa. Si contamos con un empleado contento estas situaciones se van a dar mucho menos.
Cuando un trabajador se encuentra a gusto en su puesto de trabajo va a sentir la empresa como suya y esta toma de decisiones suele favorecer al conjunto del negocio en detrimento del interés particular.
Mejora la satisfacción laboral
Si un empleado no está satisfecho su nivel de motivación desciende y acaba afectando al conjunto de la empresa. Una pequeña inversión por parte de la empresa que permita a sus empleados acceder a esta vida saludable acabará por mejorar la satisfacción de estos en su puesto de trabajo.
Cuando hablamos de un empleado satisfecho estamos hablando de un empleado que cuenta con un menor absentismo laboral, que muestra una mejor actitud y que se toma los problemas de la empresa como suyos propios. La conexión entre el trabajador y la empresa aumenta, lo que se traduce en una mayor cantidad de beneficios para el negocio.
Lealtad del trabajador
Finalmente, otro de los aspectos de los que se puede beneficiar la empresa es de contar con unos empleados mucho más leales. Un trabajador leal es aquel que está comprometido con su empresa, un trabajador que cuidará la imagen del negocio y que valorará su puesto de trabajo.
Precisamente por esto, tratará de hacer todo lo que esté en sus manos para poder mantener el trabajo ofreciendo un mayor desempeño dentro de la empresa. Además, resulta más complicado que un trabajador leal se vaya a trabajar para la competencia por el mero hecho de que no tiene necesidades que cubrir. Cuando un trabajador se encuentra a gusto dentro de una empresa no tiene tantos motivos como para querer cambiar de aires.