Llegan las navidades y parece que el mundo se agita y tiembla, así que quería empezar por recordarte que las navidades no solo van de regalos y de reuniones familiares. También hay galletas. Humor aparte, comparto contigo algunos trucos si te estresa comprar regalos o ir a muchas comidas y cenas.
- Delega y confía en tus compañeros de trabajo
Si te has tomado vacaciones, confía. Tus compañeros pueden sobrevivir unos días sin ti. Si realmente te necesitan porque hay algo urgente o alguna emergencia, te contactarán seguro. Así que a relajarse y disfrutar.
- Desconecta del teléfono móvil
Va de la mano junto con el punto anterior. Permítete apagar el móvil y desconectar del email del trabajo. Puedes crear una respuesta automática de cuándo volverás.
Y… no desconectes solo del trabajo. También de las redes sociales. Habrá muchísimas publicaciones de personas teniendo la «Navidad perfecta». En vez de hacer scroll durante horas, disfruta de un buen libro o película.
- Prepara los regalos con antelación
Seguramente será más relajado tener ya todos los regalos unos días antes de las fiestas, así te da tiempo a reflexionar qué es lo que realmente hace falta. Quiero recordarte que un regalo hecho a mano vale oro y que tu creatividad no tiene precio. De hecho, hubo un año que regalé galletas.
- Dedica tiempo al relax
Esto puede ser desde meditar un rato antes de acostarte, hacer unos estiramientos matutinos o hasta sacar a tu perro al mediodía. Para algunos es una época del año muy estresante y nadie quiere llevarte al límite. Así que «ommmmmmmmmmm«.
- Escucha y bebe con moderación
El alcohol, a veces, te puede jugar una mala pasada. Un par de copas igual te hacen ir alegre, pero más… Tal vez te convierten en más reactivo ante según qué argumentos, así que presta atención y escucha a la otra persona en vez de pensar qué será lo próximo que dirás. Si la conversación te hace sentir incómodo, cambia de tema o vete al baño (5 minutos de paz solo siempre es una buena idea).
- Agradece todo lo que hay en tu vida
Sí, sí, lo sé, las navidades pueden ser estresantes y te puedes sentir agobiado por múltiples frentes. Pero, ¿y si dedicas unos instantes a parar y reflexionar sobre todo aquello que hay de positivo y bueno en tu día a día? Seguro que puedes escribir una larga lista.
¡Felices (y relajadas) fiestas!
Artículo escrito por Irene Alda